lunes, junio 19, 2006

Calla

Calla, ya no hables mas, es tiempo de esperar...
Es hora de hacer las maletas y empacar,
de mirarte a los ojos y decir un jamás...
Jamás te volveré a mirar.

Esto ya comenzó, y no se podrá detener.
La bola está creciendo, y no espera merced.
Cae cuesta abajo, sin mirar a quien,
aplasta ilusiones y termina en mi sien.

Termina donde comienza, pero no donde nació,
porque ahí solamente estás tú, mi corazón.
Mi corazón que tiene forma de mujer,
y que tal como una rosa, desea florecer.

Florecer para estar a tu lado,
y así darte cada día un regalo.
Un beso, una caricia, unas palabras,
son acciones básicas que tengo planeadas.

Acercaría la Luna a tu piel,
para besarla entre la miel.
Mojaría tus labios con caramelo,
no dejaría de besar nisiquiera tu pelo.

Me aprenderé cada centímetro de tu cuerpo,
besando y besando, sin perder el aliento.
Seré como el agua que limpia tu piel,
te prometo, esta noche no fallaré.

Desnuda ya estás frente a mi,
desnuda, más que linda te ves así.
Deja tu pelo caer libre por tu hombro,
esta noche, no existirá morbo.

Vivamos esta noche, que será la última,
vivamos esta vida, que es la única.
Despidámonos, por esta vez,
Adiós... Por enésima vez.

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